La coccidiosis es una de las enfermedades más comunes entre los bovinos y puede tener un efecto devastador en la ganadería, si no se trata con rapidez y eficacia.  Es esencial que los ganaderos sean capaces de detectar los signos para poder tratarlos con rapidez.

En AMBiotec disponemos de varias soluciones que le proporcionan todo lo que necesita en términos de prevención y tratamiento. Siga leyendo para saber más sobre cómo nuestros productos pueden ayudarle a controlar la coccidiosis bovina.

  1. Introducción
  2. Epidemiología
  3. Ciclo biológico
  4. Sintomatología clínica.
  5. Diagnóstico
  6. Tratamiento y prevención
  7. Conclusiones

Introducción

La coccidiosis bovina es una enfermedad parasitaria de los bovinos producida por protozoarios del género Eimeria, siendo las especies más frecuentes en ganado bovino: Eimeria bovis y E.zuernii.

Afecta principalmente a animles jóvenes de entre 3 semanas a 6 meses, sin embargo, también animales de hasta 2 años pueden verse afectados por estos parásitos.

La coccidiosis se caracterizada fundamentalmente por diarrea, anorexia, anemia, cansancio y mala digestión, en ocasiones, también pueden aparecer signos nerviosos como temblores y ataxia entre otros.

Estos parásitos se alojan en el interior de las células intestinales y causan una destrucción de células y tejidos del tracto gastrointestinal. Este daño, interfiere en gran medida con la absorción de nutrientes, ocasionando una reducción de la eficiencia alimentaria y de la ganancia media diaria.

Epidemiología

Se trata de una enfermedad global que puede variar según las regiones, tipo de explotación y sistemas de manejo. Incluso dentro de la misma explotación, puede haber diferencias según raza, edad y estado productivo.

En principio, es una afección que afecta a terneros menores de seis meses, aunque, en algunas ocasiones, puede presentarse en animales mayores. Los adultos de más de 2 años no sufren la enfermedad, pero permanecen como portadores asintomáticos y son una fuente de infección para animales jóvenes.

La coccidiosis tiene una incidencia estacional relacionada con el momento del año en el que las condiciones ambientales resultan favorables para la supervivencia y dispersión de los ooquistes. (Rossanigo, 1997; Sánchez, 2007).

La enfermedad se trasmite por la ingestión de ooquistes esporulados procedentes del alimento, agua o pastos contaminados. También, lo pueden adquirir al lamer el pelaje contaminado.

La severidad de la enfermedad obedece al número de ooquistes ingeridos, si son pocos no se producen síntomas y las infecciones repetidas pueden producir inmunidad.

 

 

El hacinamiento, malas condiciones sanitarias y el mal manejo en las explotaciones favorecen la enfermedad. La entrada de nuevos animales a la explotación de diferentes procedencias, pueden aumentar el número de casos en la granja. Ya que si estos nuevos animales no han seguido un adecuado programa de control de coccidios, pueden tener en su intestino una gran concentración de estos parásitos y por ende, transmitirlo y contagiar al resto de animales aumentado su patogeneidad.

Lo habitual es encontrar infecciones mixtas de la especie Eimeria (E.bovis, E. zuernii, entre otras).

Ciclo biológico.

El ciclo biológico o vital de este parásito queda definido por dos etapas:

1. Fase asexual: se lleva a cabo en el intestino del animal.

2. Fase sexual: se lleva a cabo en el exterior del animal.

El ciclo tiene una duración de entre 5 a 22 días para E. bovis y 7 a 11 días para E. zuernii

Georgis. Parasitología para veterinarios. Dwight D. Bowman. Pag. 94

Estos parásitos se encuentran en el medio ambiente en lugares que requieren unas condiciones de humedad, temperatura (12 – 32ºC) y oxígeno apropiada para esporular, tales como el agua, alimentación, heces, pastos contaminados, etc.

Los ooquistes de la mayoria de los coccidios son esférios, subesféricos, ovoides o elipsoidales y de diferentes tamaños, esto depende de las diferentes especies que nos encontremos.

En el ooquiste se encuentran los esporoquistes que a su vez encierran en su interior un número variable de esporozoítos. El ooquiste también está formado por una pared, una cápsula micropilar y el micrópilo por donde tiene lugar la salida de los esporoquistes o esporozoítos.

 

Ignacio García Más. Benito Muñoz Araújo. Amaya Aguirre Inchaurbe. Ignacio Polo Roldán. Ana García Moreno. Pablo Refoyo Román. Departamento de Zoología y Antropología Física. Facultad de Ciencias Biológicas. Universidad Complutense de Madrid. c/ José Antonio Novais, 2. 28040 Madrid

Si el ooquiste infectante y esporuldo es ingerido por un hospedador adecuado como son los bovinos, este oosquiste, es capaz de alcanzar el intestino del animal liberando sus esporozoítos que se adhieren a las células intestinal, lo que provoca la destrucción y el daño a nivel celular y de los tejidos.

Después, en la fase final, el ooquiste se desarrolla para formar su forma sexual que le ayudará a sobrevivir en el medio externo. Se elimina con las heces para su posterior esporulación.

Sintomatología clínica.

La salud y el bienestar animal en ganaderia es esencial, por lo que reconocer la sintomatologia es de vital importancia para mejorar el estado de salud de los animales.

La gravedad de la coccidiosis depende de diferentes factores como del número de ooquistes ingeridos, el manejo del ganadero, la inmunidad del animal y lo más importante, de si se ha realizado un buen protocolo de prevención.

Tras 17 o 19 días de la infección, la enfermedad puede cursar con diarrea simple o sanguinolenta, tenesmo (intentos continuos de defecar que pueden llegar hasta el prolapso) y fiebre. Se pueden observar animales decaídos y con la región perianal sucia por las heces con sangre.

La diarrea tiene olor fétido, con sangre y moco, la sangre se mezcla con las heces a las que les da una coloración oscura o con coágulos y, en casos severos, puede contener restos de mucosa intestinal.

Los animales también pueden presentar deshidratación, pérdida de peso, anemia y, en casos graves, disnea. Hay debilidad extrema y mucosas pálidas. En algunos casos se puede producir incluso la muerte del animal.

Es necesario saber que hay animales, sobre todo adultos, que pueden estar infectados con un número no muy elevado de ooquistes y por ello no presentar sintomatología, si bien, el control de estos animales es muy importante ya que la cría de terneros con pocos días de vida pueden ser infectada debido a que no posee un sistema inmune bien desarrollado generándoles así graves problemas de salud.

 

Diagnóstico.

La correcta identifiación de animales infectados es esencial para controlar a los coccidios y evitar que se extienda por toda la explotación.

Para ello, se recomienda el análisis de heces y realizar un correcto seguimiento en la explotación.

El diagnóstico por infección de coccidios ante morten se basa en la identificación de ooquistes en las heces del hospedador, este examen coprológico puede realizarse mediante la técnica de flotación en sal que nos permite realizar un recuento de ooquistes y observar en el estadio en el que se encuentra.

Se recomienda tomar muestras de heces a más de un animal y si es posible, que lleve varios días con la sintomatología. Para la toma de la muestra se recomienda extraerla directamente del recto del hospedador y almacenarla de manera adecuada hasta ser analizada.

Ooquistes de coccidios

El diagnóstico post mórtem también es interesante, se basa en examinar las lesiones que presenta el animal. En las necropsias suelen observarse hemorragias y nódulos o placas de color blanquecino además de lesiones en las mucosas.

Tratamiento y prevención

La experiencia en el sector ganadero y el equipo veterinario de AMBiotec cuenta con una serie de procesos y protocolos cuya prioridad es la prevención, y es que esta juega el papel más importante para controlar la coccidiosis.

La coccidiosis clínica presenta los signos que la caracterizan cuando el ciclo de vida del parásito casi ha concluido y, ya para ese momento, el intestino puede estar severamente dañado. El daño del intestino y de las mucosas hace que se genere un bajo aprovechamiento del pienso y de la dieta en general lo que conlleva a una disminución en la productividad del ganado.

Para evitar estas pérdidas económicas AMBiotec cuenta con una gama natural de productos que controlan la prolifereación de coccidios, estos son los fitobióticos.

Los productos fitobióticos actúan sobre el protozoo y logran mantener una carga parasitaria baja para permitir el desarrollo de inmunidad del bovino, además de aportar otras ventajas como la modulación de la microbiota ruminal y la digestibilidad de nutrientes.

Estos fitobióticos han sido desarrollados bajo estándares de calidad FAMI-QS por el equipo de innovación y desarrollo de nuestras empresa.

Están fabricados a base de extractos vegetales y aceites esenciales, con moléculas como el eugenol, compuestos organosulfurados y compuestos fenólicos, entre otros. Estos principios activos tienen efectos antiparasitarios y son capaces de modular la microbiota, lo que conlleva a un terneros más sano.

En estudios realizados en terneros infectados por coccidios, se ha demostrado que estos productos actúan frente a estos protozoarios obteniendo resultados muy positivos y mejoras significativas en las explotaciones ganaderas.

Dentro de este grupo de fitobióticos con los componentes activos citados anteriormente, encontramos a COCCI CERO, COCCIBLOCK, CRYPTOSIN DIGEST SOLUCIÓN, CRYPTOMILK SOLUCIÓN, BILANTUL RUM y MICOXCOCCI que, de manera individual o en programas completos, tienen como objetivo el control de los procesos infecciosos de estos parásitos.

Pero no debemos olvidar otras medidas preventivas esenciales en la industria ganadera:

  • Higiene en las explotaciones: camas secas y limpias, comederos y bebederos limpios, vacio sanitario
  • Minimizar el estrés: se han de evitar factores de estrés como la presencia de enfermedades, realizando controles periódicos y haciendo uso de técnicas analíticas para el control de las mismas y especialmente, evitar hacinamiento.
  • Evitar el contacto de animales jóvenes con adultos, ya que estos no tienen un sistema inmunológico desarrollado y son más susceptibles a desarrollar enfermedades.
  • Es necesario además, que los animales nuevos estén en cuarentena par controlar su estado de salud.
  • Siempre hay que seguir las medidas de bioseguridad
  • Otorgar a los animales con una nutrición de calidad, tanto en pienso como en forrajes que les mantendrá más fuertes y sanos.
  • Programa de vacunación

Conclusiones

Los coccidios son los parásitos causantes de la coccidiosis bovina, enfermedad parasitaria que genera grandes pérdidas económicas en la industria ganadera.

La prevención es la herramienta más eficaz para hacer frente a la coccidiosis bovina y entre las medidas preventivas más importantes está el buen manejo en la ganadería, la identificación de ooquistes y el uso de productos que no generen resistencia ni tengan periodo de supresión como son los fitobióticos desarrollados por el equipo de innovación y desarrollo de AMBiotec.

Apostamos por programas integrales, es decir, desde el control de parásitos en las madres hasta el de su cría con el fin de mejorar la salud y el bienestar animal. Además contamos con laboratorio coprológico propio, lo que nos permite hacer un seguimiento íntegro en cada ganadería.

Los resultados demuestran que animales con una microbiota sana y libres de parásitos tienen unos mejores parámetros productivos lo que se traduce en animales con mejores rendimientos.

Apuesta por la calidad natural, apuesta por AMBiotec.